En estos días “raros”, en los que hemos tenido que parar y quedarnos en casa, aplaudir por el balcón para dar las gracias y continuar con nuestra rutina de forma tan diferente a nuestro día a día, hemos podido volver a aquellas actividades que por unos motivos u otros no podemos realizar en la medida que nos gustaría: la música, leer, dibujar, ver series en familia…
Por el contrario, ha habido otras que han desaparecido completamente de nuestras vidas, y como dice el refrán: “Uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde”, nos hemos percatado de la importancia que tiene la actividad física para nuestros alumnos/hijos tanto para su salud física, pero sobre todo y más en estos momentos, para su salud psicológica.
Aparte de los conocidos efectos positivos sobre la mayor parte de nuestros sistemas y aparatos, el mantener una actividad física regular tiende a acabar con el desánimo, la tristeza y la pasividad que tanto hemos sufrido en primera persona estos días y que hemos podido observar en nuestros alumnos en muchos momentos durante el confinamiento.
Está más que demostrado la importancia que tiene la actividad física (a través del juego, del deporte o de situaciones recreativas) en los primeros años de vida del niño. El desarrollo motor, de su espontaneidad, la creatividad y sobretodo el permitirle conocer, respetar y valorarse a sí mismo y a los demás, son aspectos que priorizamos en la etapa de infantil y primaria.
Estos días, alejados de las aulas, hemos podido comprobar como, muchas veces sin saber expresarlo, los niños echan de menos el movimiento, la cooperación con sus iguales y la resolución de conflictos a través del establecimiento de normas y reglas que sean capaces de crear ellos.
La asignatura de Educación Física, aparte de desarrollar la capacidad motora del niño, fomenta este tipo de situaciones a través de las múltiples propuestas de actividades que se llevan a cabo. Con el objetivo de que en estos días se siga manteniendo la actividad física en todas las casas de nuestros alumnos, se han diseñado juegos, retos, pruebas en las que los alumnos pueden seguir evolucionando durante el confinamiento. Estos retos y pruebas se irán ajustando a las posibilidades cambiantes de movilidad que tenemos estos días y supondrán un motivo de disfrute y alegría para ellos.
“El Camino de Santiago” (para alumnos de 1º-4º E.P.) y “Olimpiadas Covid-20” (5º y 6º E.P.) suponen un punto de apoyo para los alumnos que no pueden, por falta de medios o espacio, desarrollar la actividad física recomendada diaria. Pero estas actividades, deben ser complementadas con la bici o patinete, correr durante un periodo que se ajuste a la edad del niño y, en definitiva, aumentar el tiempo de actividad física elevada en nuestras salidas diarias.
Por eso, la colaboración de las familias para la realización diaria de estas actividades resulta fundamental para que nuestros alumnos/hijos vuelvan a disfrutar de sentirse activos, en movimiento y más cerca del final de esta etapa.
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